El pintor español de fama internacional Juan Pinilla expone en Madrid una selección de sus obras de las últimas tres décadas a partir del 29 de septiembre y hasta el 13 de octubre. El público podrá disfrutar de la exposición ´La pintura guiando al pueblo´ en la Galería Azur de Madrid. La obra de Pinilla transita el pop, la transvanguardia, el neoexpresionismo, la abstracción… y un sinfín de referencias que va asumiendo en su impulso creativo de más de 30 años
Impulso creativo
Si bien Pinilla se inició en la década de los 80 con abstracciones en acrílico sobre papel, muy rápidamente pasó a la figuración. Las historias que podía contar a través de la figura le abrían un inmenso abanico de posibilidades narrativas, usando la línea y el color para representar, en los primeros compases de su trayectoria, imágenes del Corazón de María, vírgenes, pero también desnudos femeninos y escenas eróticas.
Su obra empieza a recorrer Europa hacia los años 90, exponiendo en Hamburgo en varias ocasiones, en Polonia, Italia, etc. Estos viajes y contacto con el arte producido en otros países influyen enormemente en su obra. En esa época también comienza a adentrarse en el ámbito digital. Su inquietud natural le lleva a explorar las incipientes nuevas tecnologías, generando retratos e imágenes por ordenador que ilustrarían sus propios textos poéticos y cuentos.
El impulso creativo del artista se despliega a lo largo de los años como un río: recorriendo aquello que se va encontrando por el camino y sin cerrarse a un programa delimitado y definido previamente. En su trabajo encontramos desde referencias políticas hasta pintura lírica de animales y retratos fantásticos; desde personajes de cómic hasta figuras de la historia del arte. El pop, la transvanguardia, el neoexpresionismo, la abstracción, Chagall, Delacroix, Solana, Motherwell, Goya, Baselitz, son algunas de las referencias que Pinilla va incorporando a su trabajo según va avanzando en su producción.
El color en Pinilla es absolutamente significativo. Su paleta es brillante, muy amplia y colorida. En algunas pinturas elabora sus superficies con los colores primarios, como si tradujera el neoplasticismo a un lenguaje figurativo y expresionista. En otras ocasiones, elige un color y un tono dominantes y, alrededor de él, va componiendo variaciones y dibujando las formas. Otras veces, ensucia superficies planas de color para dotar de vibración y movimiento la escena. Las estrategias que Pinilla ha ido creando a lo largo de su trayectoria le han llevado a un dominio de los recursos plásticos que han hecho de él un pintor capaz de expresarse a través del color de muy diversas maneras.
La última experimentación que está llevando a cabo es la de pintar piezas de cerámica con superficies adecuadamente tratadas, una técnica que le lleva a reunir el acto creativo con el decorativo y el funcional, entroncando así no sólo con la tradición de la Grecia clásica de la decoración de utensilios de barro, sino también con los trabajos picassianos en cerámica o la producción de objetos-arte por parte de artistas europeos como Franz West o los americanos del Pattern & Decoration que trabajaban en los 80 en EE.UU.
URBAN BEAT
La Exposición ´La pintura guiando al pueblo´ del melillense Juan Pinilla llega a Galería Azur